Dónde invertir 10.000, 20.000 y 30.000 euros | EBN Banco

Ahorrar y juntar un dinero no es sencillo. Saber sacarles partido todavía menos. En este artículo daremos una serie de consejos para saber donde invertir 10.000, 20.000 y 30.000 euros

 

Para responder a estas preguntas primero tendrá que contestar a otras dos: ¿Cuál es su horizonte de inversión? ¿Cuál es su perfil de riesgo como inversor? Es decir, cuándo va a querer recuperar su inversión y cuánto está dispuesto a perder para poder ganar dinero. Y es que productos en los que invertir 10.000 euros hay muchos, pero solo una selección de ellos será adecuada para usted y sus objetivos financieros.

 

Es muy diferente invertir a corto plazo, donde normalmente primará la seguridad, que hacerlo a largo plazo, donde el foco será maximizar la rentabilidad. Para que lo entienda mejor, si usted quiere invertir 20.000 euros que necesitará dentro de tres años para comprar una vivienda, su cartera podrá asumir una volatilidad menor que si está invirtiendo para su jubilación con 35 años. El motivo es que el margen para recuperarse ante eventuales caídas en el mercado es menor.

 

Por eso mismo, una cartera inversión equilibrada a corto plazo estará compuesta por activos más conservadores que una a largo plazo. En este punto también entra en juego la segunda cuestión: el perfil de riesgo. Incluso a largo plazo habrá quienes arriesguen más y menos. La distribución de las carteras de EBN Advice es un buen ejemplo:

Dónde invertir 10.000 euros

 

¿En qué invertir dinero en 2018 si tiene 10.000 euros disponibles? En términos de productos disponibles, con esa cantidad es posible apostar por cualquier vehículo salvo una vivienda.

 

En este horizonte aparecen los depósitos, la inversión directa en bolsa o los fondos de inversión. Lo que difiere en cada caso es la rentabilidad potencial, especialmente a largo plazo.

 

En este sentido, una persona que invierta en depósitos con una rentabilidad del 0,75% anual (el 1% del Depósito SinyCon de EBN es una excepción a lo que podrá encontrar hoy en día en el mercado) apenas tendría 11.219,58 euros, descontando los impuestos, que se llevarían cada año entre un 19% y un 23% de las ganancias.

 

Los fondos de inversión tienen la ventaja de no tributar si se reinvierte la ganancia en otro fondo, algo que no pasa tampoco con las acciones. Así es factible ir rebalanceando la cartera en función de la evolución del mercado y del horizonte de inversión. Todo esto permite aprovechar mejor el poder del interés compuesto a largo plazo y mejorar la rentabilidad que obtiene por esos 10.000 euros.

 

El siguiente cuadro muestra lo que podría obtener según su perfil de inversor en un periodo de 20 años:

Los activos concretos en los que invertir dependerán ya de lo que dicte el mercado, pero lo importante es que su cartera esté equilibrada, bien diversificada e invertida en clases limpias, que tienen menos comisiones. Con 10.000 euros las posibilidades de diversificación son algo más limitadas que invirtiendo 20.000 ó 30.000 euros.

 

Uno de los errores más repetidos en este punto es invertir en demasiados activos. Apostar por una selección limitada de activos puede ahorrar mucho dinero en la operativa, sobre todo si se trabaja con acciones. Una opción es partir de fondos indexados o ETFs globales como el iShares MCSI World Index ETF e irlo completando con apuestas en renta fija y en otros índices europeos y americanos.

 

Dónde invertir 20.000 euros

 

Doblar la cantidad invertida aumenta las opciones de diversificación y permite asumir algo más de riesgo a largo plazo, si es lo que desea. Sin embargo, el mayor efecto es que aumenta el poder del interés compuesto, que funciona como una bola de nieve. A mayor capital, mayores intereses se van generando y más rápido pueden crecer esos 2.000 euros invertidos.

 

Aquí puede ver claramente la diferencia carteras para diferentes perfiles de inversión y los depósitos.

Dónde invertir 30.000 euros

 

Invertir 30.000 euros le permitirá diversificar mejor su cartera y hacer que su dinero crezca todavía más rápido. Además, podrá acceder al servicio EBN Advice, con el que contará con asesoramiento para crear su propia cartera de fondos y ETFs en función de sus objetivos y su perfil de riesgo.

 

Como puede ver, en este punto y para ese capital, los depósitos desaparecen como opción de inversión salvo que su horizonte inversor sea muy a corto plazo. El motivo, de nuevo, su falta de rentabilidad.