Rentabilidad de los fondos monetarios

La rentabilidad de los fondos monetarios ha vuelto a situarlos como una alternativa de inversión para el ahorro más conservador y quienes buscan qué hacer con el dinero en liquidez.

La subida de tipos de interés para frenar la inflación ha tenido un efecto positivo sobre el rendimiento de este particular tipo de fondo de inversión.

Qué es un fondo monetario

 

Los fondos monetarios son un tipo de fondo de inversión que invierte en activos de renta fija de muy corto plazo, como letras del Tesoro, pagarés de empresas o depósitos.  Esto hace que se trate de una inversión muy estable, pero con rendimientos limitados en función del ciclo económico.

Un fondo monetario es lo más parecido a tener el dinero en liquidez. De hecho, hay modelos de inversión como la Cartera Permanente de Harry Browne, que los usan precisamente para el porcentaje que asignan a la liquidez como forma de controlar la volatilidad de la cartera.

También hay inversores en fondos de inversión que los utilizan como puente a la espera de oportunidades de inversión. En lugar de reembolsar sus fondos de inversión, los traspasan a un fondo monetario para evitar así pagar impuestos.

 

 

De qué depende la rentabilidad de un fondo monetario

 

La rentabilidad de los fondos de inversión se calcula a diario en función del valor de los activos en los que invierten. Si el desempeño ha sido positivo, el valor de cada participación aumentará y, en caso negativo, disminuirá. Así es como se puede saber el rendimiento de la inversión en un monetario.

El valor de los fondos monetarios también se calcula a diario, pero dado su carácter especial, este no es el dato más relevante a la hora de escoger un fondo monetario. La razón es que este tipo de fondos son muy estables y poco volátiles, lo que hace más factible proyectar su rentabilidad esperada.

El papel de los tipos de interés en el rendimiento de los monetarios

 

La rentabilidad de los fondos monetarios está muy relacionada con los tipos de interés del dinero. Cuanto más altos son, mayor rendimiento ofrecen los fondos monetarios, igual que las emisiones de deuda en general.

Por eso mismo, con los tipos al 4% se ha reavivado el interés por este producto.

En la ficha de un fondo monetario se puede ver su rentabilidad en lo que va de año y también en el mes en curso. Sin embargo, este tipo de fondos también suman un dato de rentabilidad adicional: la TIR. Este es el más útil para comparar el rendimiento de un fondo monetario.

La TIR o Tasa Interna de Rentabilidad es una estimación del rendimiento que puede ofrecer el fondo monetario, algo que no verás en otros fondos. Como el universo de activos en los que puede invertir un fondo monetario es limitado, los gestores pueden calcular la TIR de la cartera en función del rendimiento que ofrecen las letras del Tesoro o bonos en los que han invertido en ese momento.

 

Costes y comisiones

 

Todos los fondos de inversión tienen una serie de costes y comisiones y los monetarios no son una excepción. Los costes de los fondos monetarios se concentran en cuatro comisiones:

  • La comisión de gestión, que es lo que cobra la gestora por sus trabajos.
  • La comisión de depósito, que va a pagar a la depositaria del fondo.
  • La comisión de suscripción, que se abona al contratar el fondo (no siempre se cobra)
  • La comisión de reembolso, que se cobra al vender (no todos los fondos la abonan).

A estas comisiones explícitas se suman otros costes implícitos en los que incurre el fondo por invertir o, en este caso, acudir a subastas de deuda.

Todos estos costes y comisiones se descuentan del valor liquidativo del fondo, salvo las dos últimas comisiones, que se abonan al comprar, vender o traspasar el fondo.

Las comisiones son uno de los aspectos de la inversión que puedes controlar al 100%. A fin de cuentas, como inversor, tú decides cómo, en qué invertir y cuánto estás dispuesto a pagar por ello.

Conviene no perder de vista que todas las comisiones son la rentabilidad que el inversor deja de percibir. Una forma de comparar los costes y comisiones de los fondos es aprovechar ratios como el TER o Total Expense Ratio.

Así es como puedes descubrir que el mismo fondo puede cargar diferentes comisiones según la clase que se contrate. El fondo en sí será el mismo, lo único que cambiará serán las comisiones y, con ellas, la rentabilidad final que obtiene el inversor.

Por eso mismo, en EBN Banco trabajamos con clases limpias de fondos de inversión, que no incluyen retrocesiones y suponen un ahorro medio del 30% en costes.

Además, podrá ver la diferencia de comisiones entre las diferentes clases de fondos y cuánto ahorra con la clase lavada, la que no incluye retrocesiones.

 

 

Dónde consultar la rentabilidad de los fondos monetarios

 

La ficha de un fondo monetario debe incluir toda la información respecto a su rentabilidad, incluido el TIR.

En las fichas de EBN Banco se puede ver un gráfico con la rentabilidad y ajustarla al periodo que quiera. También podrá comprar las diferentes clases de cada fondo para ver qué comisiones cobra cada uno y el ahorro de la clase lavada.

Recuerde que la rentabilidad de los fondos monetarios está ligada a los tipos de interés, por lo que su rentabilidad histórica no es una garantía de que vayan a hacerlo bien en el futuro.

En el buscador de fondos de EBN Banco puede encontrar los fondos monetarios comercializados por la entidad, que incluyen clásicos del sector como Groupama Tresorerie o Candriam Money Market.