Las pensiones, la esperanza de vida y nuestros ahorros

España sigue estando a la cola en conocimiento e interés por la planificación financiera. Esta realidad va mejorando, pero la concienciación al respecto y más con una crisis como la vivida, no deja de ser baja.

 

La planificación financiera de nuestros ahorros es una necesidad, no debe de ser vista como una opción o alternativa a tener en cuenta.

 

Son varios los datos y factores demográficos, económicos y sociales que nos lanzan las señales que debemos respetar y entender para comprender esa necesidad de planificar nuestros ahorros.

 

Uno de los más relevantes es la esperanza de vida. En el siguiente gráfico vemos que la esperanza de vida se mantiene creciendo de un modo sostenible de acuerdo a los datos del INE. En el año 2016, esa esperanza de vida para el español es de 83,1 años de edad, estando en lo más alto del ranking en Europa según las cifras de Eurostat:

 

 

Atendiendo a las cifras, desde el año 2000 hasta el 2010 pasamos de 79,3 años hasta los 82,1 años de esperanza de vida, viviendo por tanto de media casi 3 años más. Reduciendo aún más el ciclo, podríamos incluso estimar que la esperanza de vida se incrementa en 5 horas cada día.

 

A día de hoy, y para nuestro disfrute, España goza de una de las tasas de sustitución más altas de la OCDE, en niveles del 80,1%. La tasa de sustitución, es un indicador de cómo un sistema de pensiones consigue o no su objetivo de proporcionar unos ingresos adecuados en el momento de la jubilación respecto a los ingresos que el trabajador tenía cuando estaba en activo. El problema viene con el futuro de ese dato. La previsión es que a mediados de siglo, es decir, cuando se jubilen trabajadores que hoy se están incorporando al mercado laboral, esa tasa se sitúe por debajo del 50% o incluso del 30%.

 

Por otro lado, en España para poder jubilarse, hay que cumplir ciertas condiciones (extraídas directamente de la página de la Seguridad Social de España: http://www.seg-social.es/Internet_1/Trabajadores/PrestacionesPension10935/Jubilacion/RegimenGeneral/Jubilacionordinaria/Requisitos/index.htm). “La edad de acceso a la pensión de jubilación depende de la edad del interesado y de las cotizaciones acumuladas a lo largo de su vida laboral, requiriendo haber cumplido la edad de 67 años o 65 años cuando se acrediten 38 años y 6 meses de cotización.”

 

La realidad es que cada vez vivimos más, hasta los 83 años, y antes de los 65 años parece que no podremos jubilarnos. Por otro lado, parece insostenible que con las parcas cifras de nacimientos en España pueda haber cotizaciones suficientes como para mantener el actual sistema de pensiones.

 

La pregunta que nos hacemos es, ¿Cómo logramos mantener unas condiciones de vida de acuerdo a nuestras expectativas?,  el día que nos jubilemos, nos quedará casi un cuarto de siglo de vida por delante y las pensiones no existirán como las conocemos hoy.

 

La conclusión es que la pensión pública perderá protagonismo y el hueco que dejan las pensiones habrá que cubrirlo obligatoriamente con rentas procedentes del ahorro personal.

 

Por ello, desde EBN, recomendamos iniciar cuanto antes la planificación financiera y la gestión de nuestros ahorros, porque en quince, veinte o treinta años, puede que sea el único modo de mantener las condiciones de vida que deseamos tener el día que nos jubilemos.

 

Nadie planea fracasar, pero muchos fracasan por no planear.

 

 

Foto: Gabriel Laroche. Unsplash.